La Fundación para la Defensa del Ambiente (Funam), una organización con status consultivo en Naciones Unidas y miembro de la Renace , denunció en Marruecos que en la Argentina "los brutales desmontes provocados por la expansión de la soja y otros cultivos industriales están destruyendo las últimas fuentes de plantas medicinales que utilizan las comunidades indí¬genas y los campesinos"
La denuncia la formuló Raúl Montenegro, presidente de Funam y premio Nóbel Alternativo 2004, en el marco de la Reunión Internacional sobre Selvas y Salud organizada por la Unión Internacional de Organizaciones dedicadas a la Investigación Forestal (Iufro) a la cual fue especialmente invitado, el encuentro se realizó en la ciudad de Marrakech, Marruecos.
Montenegro denunció el funcionamiento de un laboratorio en la Reserva de la Biósfera de Yabotí donde trabajan investigadores de Gran Bretaña y Argentina. El laboratorio, ubicado en un área natural protegida de la selva misionera, investiga plantas medicinales conocidas por los indígenas que podrían ser utilizadas en la industria farmacéutica. Se instaló sin consultar previamente a las nueve comunidades mbya guaraní que viven en la reserva, y sin tener su autorización por escrito.
El ecologista también describió en Marruecos el impacto ecológico que produjeron los recientes incendios en 70.000 hectáreas de pastizales del Delta. Sobre este tema indicó en Marruecos que los dos principales responsables "fueron los productores incendiarios y la Secretaría de Ambiente de la Nación, en Argentina, que actuó con inexplicable tardanza y torpeza".
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